Andriw
Sánchez Ruiz
Leones del Caracas encontró en su cuerpo
monticular lo que Armando Reverón halló en las curvas femeninas y la luz
natural: inspiración. Los lanzadores se han convertido en musas para el equipo.
Han sido el numen que guía a un sendero alejado de los reveses.
Ayer, serpentineros melenudos volvieron a ser el
latido de la vena ganadora. Maniataron. Dieron tan pocas libertades a los
bateadores de Tigres de Aragua, que fueron la esencia del triunfo caraquista 6
por 1 en el Estadio Universitario.
Aunque la inspiración es naturalmente intangible, no
son invisibles los frutos que da. La victoria de la tarde de ayer fue la quinta
consecutiva de los avileños. Y la verdad sea dicha: han probado las mieles del
lauro en nueve de los últimos 10 cotejos.
Fotos Marcos Colina/Diario Ciudad CCS
La faena de Cory Riordan, abridor leonino, auguraba
una buena jornada para los brazos. Se mantuvo en el morrito durante 6.1
innings. Su único despiste ocurrió en el séptimo capítulo, cuando le fue
apuntada la carrera impulsada por doble de Sandy León.
“Me sentí muy bien”, le dijo el derecho al
departamento de prensa melenudo. “Resultó clave utilizar muchos cambios de
velocidad. Mi enfoque estaba en lanzar strikes”. Sus palabras no están vacías.
Hizo 71 envíos al home, de los cuales 58 cayeron en zona buena.
Los quehaceres monticulares de Riordan no fueron
desperdiciados. Al bullpen capitalino que estuvo integrado por Edgar Alfonzo,
Miller Díaz, Ángel Calero y José Ascanio, solo se le embasaron dos adversarios
en 2.2 capítulos.
Es el relevo la mayor de las musas para Leones. En
los últimos 10 compromisos solo ha permitido dos anotaciones en 43.2 tramos.
Los guarismos arrojan una efectividad minúscula (0.41).
¿Qué tan importante ha sido el bullpen durante la
inspiración caraquista? Tan relevante que, antes de la última decena de juegos,
el club perdió seis careos seguidos en los que los bomberos tuvieron una
astronómica efectividad de 11.45. He allí el numen melenudo.
Embates
necesarios
Cuando se posee un pitcheo eficaz no es
trascendental un abultado carreraje, solo las necesarias. Leones aplicó tal
fórmula.
Una carrera en el tercer inning gracias a un doble
de Harold Castro fue el primer zarpazo.
Marcus Walden, iniciador bengalí, mostró signos de
cansancio en el sexto. Fue el momento para que los leoninos anotaran dos más,
productos de doble de Félix Pérez y hit de Daniel Mayora.
La estocada a los rayados fue dada en el octavo con un racimo de tres carreras. Uno de los
protagonistas en el rally fue Yorvit Torrealba al conectar sonoro doblete a la
pradera central.
Si el pitcheo ha sido la inspirativa para Leones, el
experimentado receptor es el ojo que mide el espacio en el lienzo. En la
segunda vuelta, promedia .383 con siete impulsadas. En la fase anterior apenas
bateó .200 y remolcó una.
Por su parte, Tigres
vive una situación completamente diferente que caraquistas, pues ha caído por
tercera ocasión consecutiva.
Reseña publicada en el Diario Ciudad CCS, en su edición del 21 de diciembre de 2015.
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